3 Dimensiones para mejorar tu Estudio
- El Tiempo
Se consecuente
Se eficiente
- El Espacio
Mantente enfocado
Equipa tu espacio
- Tú
Aliméntate bien
Ejercítate
Disfruta
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Si deseas mejorar la calidad de tu estudio, un factor clave es el cuando lo vas a hacer. Somos seres de hábitos; nuestro cuerpo se acostumbra fácilmente a seguir horarios, si tú le das oportunidad de adaptarse. Es por eso que es tan difícil dejar de divertirse para empezar a estudiar. No sólo se trata de que estudiar sea aburrido, sino que cuando no estás acostumbrado, estudiar representa una conducta nueva que requiere de tus recursos físicos y mentales. Algunas claves para mejorar tu uso del tiempo son:
Elige sabiamente las horas del día en que estudiarás. No es necesario que cada día sean iguales, pero si cada semana, por ejemplo, los lunes puedes estudiar en las tardes y los martes en las mañanas pero hazlo todos los lunes en la tarde y todos los martes en la mañana. Así tu cuerpo y tu mente estarán preparados para tu rutina y opondrán menos resistencia. Eventualmente será tan natural como ver tu programa favorito de televisión los viernes a las 8
Normalmente recomiendan estudiar 2 horas al día, pero no lograrás muchos avances si sólo te sientas por 2 horas a mirar el techo, o repasar el mismo punto una y otra vez, o sólo quejarte de cúan aburrido estás. Varios estudios dicen que la clave está en los primeros 5 minutos. Sólo debes lograr vencer la oposición que tu cuerpo y mente te harán por los primeros 5 minutos, luego estarás plenamente enfocada por unos 20 o 30 minutos más; entonces es momento de tomar un corto descanso de unos 5 minutos para luego retomar tus libros. Un método particular es la técnica pomodoro
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¿Quieres mantenerte enfocado en tu estudio? Entonces mantén enfocado tu estudio. Elige un espacio donde te sientas cómodo y estudia siempre ahí. Los estudios muestran que es más fácil recordar los cosas que aprendimos en los sitios donde las aprendimos. Un simple objeto puede disparar nuestra memoria. Si no quieres tener que aprender todo una y otra vez desde el principio, escoge bien tu área de estudio y solo usa esa habitación para estudiar, así tu subconsciente sabrá a qué vas y no se distraerá
En tu área de estudio debes tener todo lo que necesite para poder estudiar, y nada más. Debes tener lápices, bolígrafos, hojas, cuadernos, borradores, libros, todo lo que vayas a usar de manera que no interrumpas tu estudio para ir a buscar algo en otro lugar. Pero no tengas nada que pueda distraerte de tu concentración. Piensa bien si ese juguete es sólo un adorno o podría distraerte; si ese libro realmente lo necesitas cerca o podría ser un extra innecesario
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Tu principal herramienta de estudio eres tú mismo: tu mente, tu cuerpo. Si tienes sueño, si tienes hambre, si estás cansado o si tienes mucho frío o calor, se te hará muy difícil, no sólo estudiar sino realmente aprender y retener lo estudiado.
Para poder estudiar, primero que nada necesitamos tener la energía que ese agotador proceso nos quitará. Pero además, un óptimo estado de salud determina un óptimo estudio. Un cuerpo bien alimentado significa un cerebro bien equipado de nutrientes para procesar más eficientemente la información.
Una reciente investigacion encontró que “Las personas que se ejercitaron horas después tenían mejor recuerdo y una activación más fuerte y más clara en las áreas de su cerebro asociadas con la recuperación de la memoria” [1].
Las cosas que se hacen a regañadientes difícilmente salen bien. Si piensas que estudiar es una molestia, te costará mucho más mantenerte enfocado. Disfruta lo que haces, piensa en los beneficios que te traerá, empieza a saborear los beneficios. Si no puedes siquiera fingir, pon una gran sonrisa en tu rostro. Esto hará creer a tu mente que estás feliz
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